El cabezazo de Sergio Ramos en un saque de esquina se estrella en la espalda de Antonio Rüdiger. En un principio pareció que Sergio Ramos le había ganado la partida a Mohamed Salah, pero el egipcio recuperó el balón y dio continuidad a la jugada. Errores en la salida y un posible penal que no se marcó a favor de Atlanta. El Shaarawy se descolgó con un control soberbio en carrera y siguió la diagonal hacia portería, pero antes de que pensara en disparar apareció el francés para quitarle las ideas.